Una crónica de la corrupción moral
Fresca, joven, actual y ligera. Así es Abbie (Alfar), la novela de Sergi Escudero que retrata la corrupción moral de la sociedad actual. Barcelona es el escenario de la historia protagonizada por Jordi Romero.
Abbie es el nombre de la novela y también del bar del protagonista, un camionero que ha dejado la rosca para trazar las últimas líneas de su vida en una especie de club clandestino donde no existen las normas ni la prohibición.
Un bar que se convierte también en protagonista al albergar todas esas otras historias que conforman este relato crítico con la clase política y con los medios de comunicación.
Abbie es una mirada cargada de indignación, una crónica de las turbias aguas por las que caminan ciertos indeseables personajes, un reportaje -como el de Marc, ese joven periodista que reprenta a la perfección la realidad y las precariedades con las que convivimos en este oficio- novelado en el que no faltan elementos como el mundo de las drogas o la prostitución.
"Te pasas la vida esperando que pase algo y, cuando pasa, te importa poco. Qué contradictorios que somos y cuántos pensamientos tiramos en balde". En esa espera no puede faltar la oportunidad a Abbie.