El Yermo, la novela postapocalíptica de Sergi Llauger
El mundo se muere, ¿qué estarías dispuesto a hacer para sobrevivir?
Si te gustan los libros de ciencia ficción con historias apocalípticas toma buena nota del siguiente título: El Yermo, una obra que fue publicada por primera vez en 2013 y que ahora ha sido reeditada con acierto por Dolmen.
Una historia que nos lleva a la Gran Bretaña del futuro, donde nos encontraremos con una realidad que nada tiene que ver con la que habitamos actualmente. Un mundo totalmente diferente, sin apenas recursos y con un pequeño número de supervivientes.
Gran Bretaña, destruida tras una explosión nuclear
Sergi Llauger (en la imagen), autor del exitoso Diario de un Zombi, firma una historia repleta de suspense, acción y momentos emocionantes. Bien ambientada, con unos personajes construidos notablemente y gran destreza en la narración, El Yermo nos sumergirá en este viaje épico por una Gran Bretaña que languidece tras una explosión nuclear.
Con una trama que sorprende, que va dando giros constantemente, que te atrapa, la novela transcurre a un ritmo tenso pero sin dejar a un lado la frescura. Es una lectura ágil y entretenida. Aunque con un estilo diferente, nos ha traído al recuerdo La carretera, la novela distópica de Cormac McCarthy. Adam y Caleb, dos hermanos huérfanos, son los protagonistas de la historia. Luchan por sobrevivir a la radiación, al desierto y al peligro en el que se ha convertido el propio hombre para el hombre. Una novela que disfrutarán los amantes del género.
Extracto de El Yermo
Medio círculo solar ya asomaba sobre el cielo de levante cuando el grupo echó a andar para adentrarse poco a poco en las tierras hostiles del mundo inhabitado. No tardaron en cruzar la carretera y sobrepasar la frontera con la Zona Prohibida; un límite que ninguno de ellos había quebrantado desde antes de la Guerra. Adam se sintió extraño al dar un paso más allá del punto más lejano que había llegado a pisar; fue como desafiar a un gigante, como romper las leyes que habían regido su existencia. El aspecto de las ruinas que los rodeaban se volvió de repente mucho más amenazados y oscuro, como si una bruma mística las cubriera; la calidez del os últimos días descendió de golpe hasta convertirse en un frío espeso y estancado... o eso fue lo que percibió. Tan pronto dejó atrás el sector de la Veguería, por la mente de Adam pasó la fugaz idea de regresar algún día, de volver a pisar aquella tierra árida y arenosa que lo había visto madurar y convertirse en el superviviente que ahora ahora.