Un desierto de hielo, un trepidante thriller ecológico
Maite R. Ochotorena es la autora de una novela de lo más adictiva
Ya la ambientación, situada en una base científica noruega en la Antártida, es especial. A eso se le suma otros ingredientes especiales que hacen de Un desierto de hielo (Planeta) una novela de lo más recomendable. En la referida base, en un lugar inhóspito, los científicos, curiosamente, investigan la vida.
Un thriller ecológico escrito por Maite R. Ochotorena en el que nos encontraremos con muchos momentos de intensidad e intrigas por resolver. La investigación de un asesinato es el eje sobre el que se mueve la historia. Un cadáver aparece en la nieve con una herida desde el esternón hasta el pubis. Sobre su vientre lleva escrito la palabra Kripos.
El frío de la Antártida se puede sentir en una historia ambientada notablemente que transcurre bajo un ritmo muy intenso
Sobre 'Un desierto de hielo', de Maite R. OchotorenaEl escenario sobre el que transcurre la novela imprime carácter a la trama. Con un ritmo trepidante, vamos a sentir el frío y la tensión de Mikel y Erika, los dos protagonistas de la investigación. La trama está notablemente orquestada. Una vez que te adentras en la historia, cuesta mucho soltarla y, casi sin darte cuenta, empiezas a devorar las páginas.
Una lucha por la supervivencia en un lugar sin apenas vida, una historia que por momentos nos enloquecerá y que cuenta con un claro y necesario mensaje sobre el medioambiente. Un viaje del Cantábrico a la Antártida que no dejará indiferente a ningún lector.
Así comienza...
Synne alzó la vista del ordenador. Se quedó muy quieta, esperando volver a oír ese golpe sordo. Había sonado en el exterior, estaba segura. Se adelantó un poco y atisbó por la ventana del módulo médico la oscuridad nocturna y la tormenta de nieve que azotaba la base. De inmediato pensó en Björg.
Björg, que estaba desaparecido.
Björg, al que habían dado por muerto.
«Nadie puede pasar tres días ahí fuera y sobrevivir».
Si es que estaba ahí fuera. Si es que se había perdido.
El viento sacudía el edificio haciendo virar su estructura. Synne se estremeció.