La originalidad y la ironía se llaman 'Siebenkäs'
"Un autor genial que nadaba como nadie entre los antagonismos. Un gran humorista", así definía el escritor Hermann Hesse a Jean Paul Richter (1763-1825), autor de Siebenkäs, la nueva novela que acaba de publicar la editorial Berenice dentro de su colección de Clásicos.
Su rastro es evidente en la literatura de Hoffman, Dostoievski, Thomas Mann, Hesse, Robert Walser, Borges, Gunther Grass o Claudio Magris, y su paso por la vida dejó una huella indeleble, como así lo atestigua el autor de El lobo estepario en el prólogo de esta edición: "Fue, más que ningún otro de su época, el más querido por el pueblo alemán, sobre todo por las mujeres; la juventud estaba embriagada por su obra y su persona. Sobre sus libros se derramaron lágrimas, se crearon amistades y se hicieron promesas sagradas y sobre su persona se contaron innumerables leyendas".
En Siebenkäs el autor crea la figura del "doble" que después se ha utilizado innumerables veces, y que ha inspirado obras centrales de la modernidad literaria, afirma el director literario de Berenice, David González Romero, para quien Richter "desafió de una manera absolutamente original los límites de la estructura de la novela como se entendía hasta ese momento y revolucionó el género de cara a la modernidad posterior".
La novela narra la vida del abogado de pobres Firmian Stanislaus Siebenkäs desde que contrae matrimonio con la modista Lanette Egelkraut. A su enlace acude su amigo más íntimo, Heinrich Leibgeber, con el que comparte, además de una fuerte identificación personal, un asombroso parecido físico.
Infelizmente casado, Siebenkäs va a consultar a su amigo, Leibgeber, que, en realidad, es su alter ego, o doble fantasma. Leibgeber convence a Siebenkäs para fingir su propia muerte, a fin de comenzar una nueva vida. Siebenkäs toma el consejo de su alter ego, y pronto conoce a la bella Natalie. Los dos, protagonista y doble, se enamoran, y empiezan el camino hacia esa boda después de la muerte a que se alude en el título.