Fantasías y aventuras en 'Monozuki. La chica zorro'
Una novela juvenil que nos acerca a las costumbres y cultura japonesa de la mano de R.G. Wittener
Una saga que va a gustar mucho a los jóvenes lectores amantes del género. Fantasías y aventuras en una novela que camina por las costumbres, tradiciones y cultura japonesa. Una historia que cuenta con una joven protagonista que se las tendrá que ver con señores feudales y criaturas de lo más misteriosas.
Monozuki se humedeció los labios, acarició las cuentas del collar y miró a Zeno por el rabillo del ojo. El zorro estaba acorralado entre dos fardos
Monozuki. La chica zorroMonozuki. La chica zorro es el título del libro escrito por R.G. Wittener y editado por Carmot Press. Nos encontramos ante un relato fresco y fácil de leer aunque no seas un gran dominador del género. Se agradece que el autor no busque caminos laberínticos en una narración en la que recrea notablemente ese lugar fantástico.
Bien estructurada, la naturaleza y la magia se dan la mano para alimentar una historia que también nos invita a reflexionar sobre determinados valores como el respeto y la convivencia. Los personajes están bien conseguidos y algunos pasajes del libro nos sorprenderán. Monozuki, la joven protagonista, es una aprendiz de vidente que asistirá al enfrentamiento entre protectores y destructores de la naturaleza.
Así comienza...
"Para los habitantes de Tojinbo, la aparición ciclónica de Monozuki era algo tan rutinario como el amanecer o el flujo de las mareas, así que ninguno se extrañó aquella tarde al verla corretear descalza por entre las pasarelas, escaleras y puentes de cuerda que comunicaban las incontables casas del poblado, adheridas al acantilado como moluscos al casco de un barco.
-Buenas tardes -saludo en un jadeo al grueso señor Taro, que estaba en la puerta de su carpintería, antes de retomar la carrera-. Buenas tardes -gritó en el salón de té de la señora Tomomi, mientras lo recorría de un extremo a otro, para hacerse oír sobre el sonido de la música".