El retrato literario que entusiasmó a García Márquez

El 13 de abril llegará a las librerías Memoria por correspondencia, de Emma Reyes, publicado por Libros del Asteroide y con prólogo de Leila Guerriero.

El referido título fue el libro revelación del año en Colombia en 2012, un éxito unánime de crítica y público: "Un relato digno de Dickens. Un nuevo clásico, un libro duro y entrañable destinado a perdurar", ha dicho de él Darío Jaramillo. El libro será publicado en inglés en la prestigiosa colección Penguin Classics: un extraordinario y merecido reconocimiento para una escritora que no aprendió a leer y escribir hasta que fue adulta.

Memoria por correspondencia es el relato en primera persona de la durísima infancia y adolescencia de la pintora Emma Reyes (Bogotá, 1919—Burdeos, 2003) en la Colombia de los años veinte del siglo pasado. Huérfana y abandonada junto a su hermana al cuidado de una extraña, sus primeros años de vida transcurren en la miseria; posteriormente serían internadas en un convento donde vivirán como fámulas y del que no podrán salir durante quince años.

En 1969, cuando Emma Reyes llevaba años viviendo en Francia —donde se había labrado una destacada carrera como pintora y dibujante—, le envió a su amigo el historiador Germán Arciniegas la primera de las 23 cartas que forman este libro y en las que le relataba cómo había transcurrido su infancia.

Arciniegas se las mostró a Gabriel García Márquez, que quedó entusiasmado y la animó a seguir escribiendo. Emma Reyes quiso que las cartas se publicaran solo después de su muerte. En esta edición, que incluye un prólogo de Leila Guerriero y un epílogo de Diego Garzón (texto galardonado con el Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar), el lector descubrirá en ellas la misma fuerza de la narrativa oral, la poesía y la honestidad que ya han conmovido a decenas de miles de lectores.