El juicio de Adolf Hitler o cómo nació la Alemania nazi
El historiador y escritor David King recorre en las páginas de su libro el proceso judicial que condenó a Hitler por alta traición antes de su ascenso al poder
"Poco antes de las ocho y media de la mañana, el acusado Adolf HItler hizo su entrada en la sala donde iba a celebrarse el juicio, que estaba repleta de público". Corría el 26 de febrero del año 1924, día en el que comenzaba el juicio por alta traición contra diez acusados, entre los que se encontraba el hombre que acabaría marcando la historia negra de Alemania y el resto de la humanidad.
"Si los declaraban culpables -cuenta el prólogo-, el artículo 81 del Código Penal establecía una pena máxima de cadena perpetua. Sin embargo, a HItler -que había nacido en Austria y aún no tenía la nacionalidad alemana- podía aplicársele una segunda disposición legal". ¿Sería Hitler condenado, encarcelado, deportado y posteriormente olvidado?
Aunque la historia y el desenlace de los acontecimientos son de sobra conocidos, el desenlace de esa sentencia judicial que pudo haber cambiado el curso de la historia son prácticamente desconocidos para el gran público.
Y a ese juicio, que lejos de quitar del mapa político al posterior Führer multiplicó incluso su imagen como líder, le pone la lupa David King en El juicio de Adolf Hitler. El putsch de la cervecería y el nacimiento de la Alemania nazi (Seix Barral).
Todo comenzó la tarde del 8 de noviembre de 1923 cuando Hitler proclamaba la revolución tras disparar su pistola al aire en una de las mayores cervecería de Múnich. Tres meses y medio después estaría siendo juzgado por estos hechos. La sentencia se conoció el 1 de abril de 1924.
Todo el proceso judicial y el veredicto final del tribunal queda expuesto en este enorme trabajo de documentación. Detallado al máximo, al principio del libro el autor ofrece unos pequeños apuntes y referencias de los personajes principales. La obra también está cargada -tal vez es uno de los peros que se le puede poner a El juicio de Adolf Hitler- de unas notas que en las páginas finales enlazan con las fuentes bibliográficas. Más de 130 páginas están dedicadas a esta cuestión.
No es un libro de lectura ágil, por la cantidad de protagonistas reales que van apareciendo y de situaciones relacionados con lo político y judicial de la época que son detalladas, pero nos encontramos ante un libro único, ya que hasta su publicación nadie había abordado en profundidad el juicio de Hitler. No había un libro de tales características. Por esta razón hay que darle el valor que merece a este enorme trabajo de King.
El dictador nato nunca necesitará que lo alienten, le bastará con su voluntad: no será necesario que lo empujen, él mismo se obligará
El juicio de Adolf Hitler
