Un paraíso en el infierno o cómo renacer tras el desastre
Del terremoto de San Francisco a las inundaciones de Nueva Orleans en un libro que nos anima a pensar en un mundo mejor tras los malos tiempos
Aunque pensemos que la solidaridad, los valores y la empatía se pierden por completo en tiempos de drama humanitario como el que estamos viviendo por culpa de la pandemia mundial, no siempre es así. Hay muchas veces en las que la catástrofe, ya sea social o provocada por la naturaleza, se convierte en Un paraíso en el infierno (Capitán Swing).
Este libro recoge, precisamente, el relato de esas comunidades que han surgido tras el desastre. Y han renacido sin perder la sonrisa, la alegría y la ilusión por salir adelante. Una obra muy bien documentada que nos puede animar a pensar en un mañana mejor en estos tiempos tan complicados.
"A todos nos han metido en la cabeza que el pánico implica siempre la transformación de la población en una masa informe y desorganizada. Mil veces hemos visto estas estampidas donde la población se golpea y se empuja y pierde, en general, la cabeza". Tal vez, de alguna forma, estemos viviendo algo muy parecido en la actualidad por culpa del Covid-19.
En EE.UU no existía el lenguaje capaz de describir lo que emergió de los escombros de las Torres Gemelas, como tampoco existía la imagen de lo que la ayuda mutua, el altruismo, la colaboración, la improvisación y el empoderamiento de la población podían ofrecer en una sociedad libre para inventar y dirigir sus propios designios
Un paraíso en el infierno
Rebecca Solnit (en la imagen) es la autora de un libro que nos invita a enfrentarnos con fortaleza a las catástrofes que pudiéramos vivir. Partiendo de la base de que los desastres siempre son terribles y dolorosos, Solnit insiste en no dejar pasar las oportunidades que pueden aparecer en momentos de adversidad.
La autora analiza en profundidad cinco catástrofes: el terremoto de San Francisco (1906), la explosión de Halifax (1917), el terremoto de Ciudad de México, la transformación de Nueva York tras el 11S y las inundaciones y huracán sufridos por la ciudad de Nueva Orleans.
La gente sabe qué hay que hacer en el desastre. La pérdida de energía eléctrica, la versión moderna del desastre, es una desgracia, pero la reaparición de esos antiguos cielos es su contrario. Es el paraíso que nos abre las puertas en el infierno
Un paraíso en el infiernoLos desastres son inevitables, así como la transformación que sufre el mundo cuando llegan. Todo cambia, desde la sociedad a cada uno de nosotros, que nos tenemos que replantear nuestra vida. El libro es una gran reflexión sobre ello. Toca adaptarse a las nuevas circunstancias, a esa llamada nueva normalidad en la que insisten los poderosos, que son los que suelen sacar más tajada de los tiempos de catastrofe.
Como bien apunta Solnit —a la que también hemos leído en El arte de perderse— en el libro, mientras que las élites hablan de pánico y saqueos para confundir, la sociedad lo único que hace es intentar sobrevivir y superar la crisis económica. Reflexionaremos mucho a lo largo de las páginas de Un paraíso en el infierno.
