Giselle, el amor y la magia del ballet en un cuento infantil
Un álbum ilustrado que ha sido adaptado musicalmente por la Compañía Nacional de Danza
La magia del ballet como símbolo del amor romántico en una historia protagonizada por Giselle, una heroína que da nombre también al libro escrito por Inés Martín Rodrigo e ilustrado por Raquel Aparicio. El amor idealista, el desengaño y la libertad forman parte este álbum ilustrado que ha sido adaptado musicalmente por la Compañía Nacional de Danza para estrenar en el teatro de la Zarzuela la producción Giselle.
Como apunta en una nota inicial del libro Joaquín de Luz, director de la Compañía Nacional de Danza, el cuento Giselle nace "con el deseo de contar a niñas y niños, hombres y mujeres adultos, de un modo cercano y accesible, la historia de amor puro y verdadero de su protagonista". Una historia que, sin lugar a dudas, permanecerá en la memoria de los lectores, que sentirán todas esas emociones y valores que transmite este libro.
Un proyecto en el que solo han intervenido mujeres
La historia de una joven campesina que se enamora de un apuesto extranjero que se hace pasar también por campesino cuando realmente es un príncipe es el argumento de esta romántica historia que, teatralmente, fue estrenada en la Ópera de París en 1841. Inés Martín, como bien apunta la editora de Tres Hermanas —editorial encargada de la publicación de Giselle— ha utilizado "el recurso narrativo de las matrioshkas o del cuento dentro del cuento". El cuento es un proyecto de mujeres, ya que desde el origen de la idea hasta su materialización final solo han intervenido mujeres.
Un libro lleno de sensibilidad y belleza que cierra el broche magistral con unas rimas de Gustavo Adolfo Bécquer. Una apuesta original ya que no son muchos los libros dirigidos al público infantil que tienen al ballet como protagonista. Como cuenta Cristina Pineda, editora de Tres Hermanas, "cuando eligieron a nuestra editorial para que fuera la encargada de publicarlo, todos los elementos de nuestro ideario encajaron y también nuestros principios fundacionales cobraron sentido. Los temas del Romanticismo: el amor, el desengaño, la representación de una naturaleza agreste y hostil, la libertad, el amor idealista, la evasión, la finitud de la vida, el vínculo indisoluble del amor y la muerte ya aparecían representado en nuestros primeros libros de la colección de ilustrados".