En los mares del Alzheimer
La entretenida y a la vez emotiva historia de un nieto y un abuelo que sufre la enfermedad del olvido
No es fácil hablar de una enfermedad como el Alzheimer y menos introducirla en un libro dirigido al público juvenil. Hacerlo de una forma entretenida y restándole dramatismo al asunto es lo que ha conseguido Francisco Castro en Me llamaba Simbad (Algar), una historia muy emotiva de un niño y su abuelo, que padece la maldita enfermedad.
Ya os dije que sé que mamá quiere mucho al abuelo aunque a menudo dice eso de que se está volviendo loca por su culpa. A veces también lo de mí y sé que me adora. O de mi padre.
'Me llamaba Simbad'Paulo es el protagonista, un niño de 10 años al que su abuela llama Simbad. No es el único nombre que cambia. El abuelo lo olvida todo y hace cosas extrañas que antes no hacía. Incluso un día desaparece y será Paulo quien acabe encontrándolo, al igual que también dará con un secreto familiar.
Si hubiera una olimpiada de hablar por móvil, mi padre sería indiscutiblemente medalla de oro.
'Me llamaba Simbad'Una lectura que hará reír, que sacará sonrisas, pero también nos emocionará. Mientras que los padres, siempre muy ocupados, no prestan tanta atención a Paulo, es curiosamente con el abuelo con el que mejor se lo pasa el joven Simbad.
El libro es un retrato familiar de cómo es la enfermedad y cómo se sobrelleva en una familia. Una historia tan emotiva como necesaria para que los jóvenes lectores tengan un mayor conocimiento sobre el Alzheimer.