Barcelona no cierra en agosto
Eduard Palomares debuta en la novela con una historia de detectives ambientada en la Ciudad Condal de nuestros días
Todo un descubrimiento No cerramos en agosto (Libros del Asteroide), una novela negra ambientada en la Barcelona actual que cuenta con una narrativa muy visual. Una historia que se aleja de los estereotipos del género y que, con buenas dosis de humor, retrata muchos de los problemas de las grandes ciudades.
Eduard Palomares (en la imagen) es el autor de una historia que mantiene la intriga en todo momento. Novela ideal para un fin de semana o para desconectar de la realidad durante un par de días.
De lectura ágil, cuenta con unos personajes muy bien definidos. La trama es interesante y ya estamos esperando alguna historia más con Jordi Viassolo, detective en prácticas al que se le empiezan a complicar las cosas, como protagonista. Una novela fresca y divertida sobre una Barcelona real en la que no todo es tan bonito como a veces se pinta.
Los problemas laborales, los contratos basura, los altos precios de la vivienda o la masificación del turismo son algunos de los temas que aborda No cerramos en agosto, un libro sobre la supervivencia de esa parte importante de la sociedad actual que vive en precario.
Temas como los altos precios del alquiler, el turismo masivo o los contratos basura forman parte de una novela negra muy fresca y actual
No cerramos en agostoEl protagonista es tan cercano como el lenguaje directo empleado por el autor. Es fácil empatizar con este detective becario que acompaña a Eduard Palomares en su debut novelístico tras más de quince años ejerciendo como periodista.
Así comienza...
"Siempre me han fascinado los detectives de novela. Personalidad de hierro, poco aprecio por la autoridad, empatía con el débil, talento para nadar a contracorriente y esa habilidad innata para crear metáforas tan afiladas como una maquinilla de afeitar recién estrenada. Son brillantes, duros, tenaces, ingeniosos, cínicos, íntegros, carismáticos... Pero hay una cosa que siempre me he preguntado: ¿cómo han llegado a ser así? Quizás ya les viene de serie. O no, tal vez han tenido buenos maestros o han ido mejorando con el tiempo. Eso nunca aparece en los libros. Seguramente porque a nadie le importa".
